Se trata de una versión libre de la obra “El Monte Calvo” de Jairo Aníbal Niño. En ésta los personajes comparten directamente sus vivencias con el público, que termina por convertirse a su vez, en otro personaje más de la historia. Es un montaje de Teatro Panóptico, concepto en el que ha venido investigando la compañía y que pretende reconfigurar la esencia de lenguajes como el Teatro Participativo, el Teatro de Inmersión, el Teatro Sensorial y el Teatro Experimental.  En esta versión tanto personajes como espectadores, comparten el mismo lugar. Por un momento todos son iguales, incluso hasta el más desprevenido de los asistentes tendrá se verá sumergido en los sucesos que propone el montaje. En esta puesta en escena lo onírico se confunde con lo real, la locura con la cordura y el placer, con el dolor. Después de Muertos de Hambre, la vida no será la misma.